¿Cuál es la mordida más fuerte del mundo? Es una pregunta que posiblemente uno de nuestros hijos nos haga después de ver un documental sobre cocodrilos. Como si de un niño pequeño se tratase y como gente curiosa y experta en dientes que somos, una cosa que siempre nos ha fascinado es el estudio y la evolución de la dentadura humana a lo largo de cientos de miles de años.
¿Cuáles son las mordidas más fuertes del mundo?
Muchas personas tal vez desconocen qué es el bruxismo. Pues bien, con este término se designa comúnmente la acción de apretar y rechinar los dientes, pudiéndose producir tanto por el día como durante la noche.
Técnicamente, el bruxismo consiste en una disfunción de la articulación temporomandibular (ATM), situada entre el hueso temporal y la mandíbula, y que es la que permite el movimiento mandibular. También, gracias a esta articulación son posibles las funciones de masticación, fonación y deglución.
El trastorno de esta articulación provoca alteraciones en los músculos mandibulares y estructuras cercanas, dañando la articulación y la musculatura de la masticación que conecta la mandíbula con el hueso temporal.
Causas del rechinar de los dientes
No resulta fácil tratar el bruxismo, ya que puede deberse a una gran cantidad de factores. Tanto es así, que, en algunos casos, las causas pueden quedar sin determinar.
Se habla de la desalineación de los dientes, o maloclusión dental, como uno de los motivos por los que aparece el bruxismo; si bien la opinión médica ofrece opiniones no coincidentes respecto a que sea una causa directa, o tal vez el resultado de la acción de rechinar los dientes.
Por otro lado, el aumento de la ansiedad y el estrés pueden empeoran el rechinamiento dental. Asimismo, tomar antidepresivos, consumir drogas o fumar incrementan exponencialmente las probabilidades de sufrir bruxismo.
Por último, consumir alcohol y cafeína en grandes cantidades, sufrir trastornos del sueño o padecer alteraciones de carácter neurológico, como la enfermad de Parkinson o Huntington son puntos determinantes que provocan la aparición o agravamiento del rechinar de dientes.
Tratamiento para el trastorno de apretar los dientes
Estos tratamientos van dirigidos a reducir el dolor y prevenir el desgaste de los dientes y daños permanentes en la mandíbula. Existen varias opciones para tratar el bruxismo.
Dentro del uso de fármacos para tratar el hábito de apretar los dientes, encontramos los analgésicos o los antiinflamatorios, indicados para disminuir la inflamación y el dolor producido por esta dolencia.
Otro método usado tradicionalmente son las férulas de descarga o protectores dentales, unos dispositivos cuya finalidad es reposicionar los cóndilos a su posición de relación céntrica, a la vez que relajan los músculos de forma progresiva.
También está la opción de acudir a un fisioterapeuta, donde se pueden trabajar una serie de ejercicios para recuperar y proteger la correcta funcionalidad de las estructuras móviles, mediante movimientos terapéuticos.
Asimismo, la cinesioterapia está indicada para aumentar y conservar la amplitud del movimiento de la articulación. La electroterapia, en cambio, se vale de ondas electromagnéticas para relajar la musculatura y mejorar el flujo sanguíneo y la inflamación de la mandíbula.
Reducir el estrés y un buen manejo de la ansiedad pueden también disminuir el bruxismo, así como la aplicación de una ortodoncia dirigida a ajustar y alinear los dientes. En última instancia, podría valorarse la posibilidad de acudir a la cirugía.
Si tienes dudas sobre qué es el bruxismo y cómo tratarlo, en nuestra clínica contamos con profesionales expertos de amplia experiencia en odontología que te darán una atención personalizada, para ofrecerte la mejor solución a tu problema bucodental. Descargar